lunes, 24 de enero de 2011

Historia de la Comunidad de Nahuelpan

A fines del siglo XIX, estimativamente entre los años 1889-1892 el Cacique Francisco Nahuelpan, cuyo nombre se estima lo tomó de su amigo el Perito Moreno, se establecía al frente de su propia Tribu en el paraje y lugar que actualmente ocupa a 15 Km. de la ciudad de Esquel, provincia del Chubut. Nacía así la Comunidad Aborigen Nahuelpan, que en su momento llego a componerse de más de 300 personas, entre varones, mujeres y niños de origen Mapuche, Tehuelche y Araucanos que convivían y respondían a las directivas de su único y natural Cacique Francisco Nahuelpan. Esta hegemonía se ha mantenido desde esa época a la fecha, en la que no ha habido ni hubo cacique que no fuese descendiente directo de Nahuelpan.
Año 1902 en la Escuela Nº 18 “del Corinto”, como se conoce a este sitio en la Colonia 16 de Octubre, se definió el litigio territorial de Argentina y Chile por la posesión de una gran franja de tierra en esta zona patagónica, la Tribu Nahuelpan y pobladores galeses del lugar reafirmaron los derechos Argentinos en lo que hoy es el Departamento Futaleufú.
Esta demostración de argentinidad fue tenida en cuenta por el árbitro británico Coronel Sir Thomas Holdich, siendo el argumento de mayor peso que influyó en su decisión final favorable a nuestro país. Diversos historiadores nunca reflejaron con exactitud la actuación que le cupo a nuestro abuelo y su gente en este gran acontecimiento, el decreto 5047 del 3 de Julio de 1908 firmado por el presidente Figueroa Alcorta reconoció el gesto del cacique Nahuelpan y dispuso para la tribu del mismo una superficie de 19.088 hectáreas ampliada en 1922 con 2500 más, lo que hacia unas 9 leguas de campo aproximadamente. Se producía así el primer reconocimiento a nivel nacional del cacique Francisco Nahuelpan y su tribu.
Llegamos así al Decreto del 5 de Mayo de 1937 promulgado por un gobierno de facto que declaró caduca la Reserva Nahuelpan incentivado por las campañas de desprestigio iniciadas años antes por conocidos terratenientes de esa época como los hermanos Amaya, principales ideólogos de la misma, facilitados por las conexiones y amistad que mantenían con las altas esferas del Gobierno Nacional, Ministerio de Guerra, de Agricultura y la Dirección General de Tierras, más la complicidad de medios escritos y otros factores como el pésimo informe del Dr. Madueño.

Resultaron lapidarios para la suerte de la tribu Nahuelpan que fue condenada a sufrir el más terrible y arbitrario desalojo que marcaría para siempre la existencia de sus integrantes: es que fueron echados a la calle, a un destino incierto, obligados a emigrar hacia distintos rumbos perdiendo todos sus bienes, otros la vida; hoy a 68 años de esa tamaña injusticia aún se sigue esperando una reivindicación histórica del Gobierno, deuda que mantiene con esta Comunidad. Esta triste paradoja del destino que sufrió la tribu de Francisco Nahuelpan con todas sus gravísimas consecuencias marcaba el segundo reconocimiento Nacional y Regional de la misma.
Este desalojo conducido operativamente por el Comisionado de la Dirección General de Tierras Miguel A. Mas de Ayala, secundado por el auxiliar 4to Juan Baroni y el ayudante Efraín E. Brulandi, de la Oficina de Tierras de Esquel, contó con el apoyo armado del Ejército y la Policía del Territorio.
El 15 de Noviembre de 1943 mediante Decreto 13806 dictado en el Expediente 79806/35, el gobierno intenta reparar parcialmente el error cometido con la tribu de Francisco Nahuelpan y ordena la restitución de los lotes 2, 3 y 6 a los descendientes directos del mismo.
La familia grande de Nahuelpan reducida a los ocho descendientes directos de Francisco 1ro, volvía al lugar al que nunca renunciaron con nuevos bríos, dispuestos a enfrentar esta nueva etapa, su primera acción agradecer a “Futa Chao”, Dios o Padre Grande, y pedir la protección de sus ancestros mediante la tradicional ceremonia religiosa (rogativa mapuche, Camaruco), que la comunidad realiza cada tres años, los 20 de Marzo.
Esta Reseña Histórica parcializada en su contexto, es vivencia directa de quienes la componen y llevan el apellido de su fundador, don Francisco Nahuelpan el legendario lonko de origen Tehuelche otrora el señor de esta zona; perpetuando también la memoria y grandeza de nuestro abuelo, se erige imponente y altivo el majestuoso “Cerro Nahuelpan” como un vigía permanente y protector de su gente, calles de Esquel y Trevelin, la Estación del Trochita y arroyos de la zona portan el apellido de este lonko.

Francisco Argentino Nahuelpan

2 comentarios:

  1. Saludos
    Deseo saber sobre la historia y memoria de florentino nahuel pan.
    Mi nombre es wilson valencia
    Correo: citrinogema@gmail.com
    Me identifico con las comunidades que fueron violentadas y despojadas de toda armonía.

    ResponderEliminar
  2. Saludos
    Deseo saber sobre la historia y memoria de florentino nahuel pan.
    Mi nombre es wilson valencia
    Correo: citrinogema@gmail.com
    Me identifico con las comunidades que fueron violentadas y despojadas de toda armonía.

    ResponderEliminar